2022-02-17

103 .- Que nos ha traido la democratización de la enseñanza?

 


 


 

Se viene hablando de la necesidad del reforzamiento de determinadas asignaturas entre ellas las humanidades, si bien el punto caliente del currículo escolar está en como deben organizarse los contenidos mínimos que el gobierno puede marcar a las comunidades autónomas. En cualquier caso yo siempre he pensado que la  pretendida “Reforma de las Humanidades”   se queda corta , puesto que lo que se está necesitando no es sólo un fortalecimiento del saber humanístico sino una reforma de la persona  y de su comportamiento moral y humano, tal y como lo están pidiendo ciertas actitudes y hábitos de comportamiento en adolescentes de corta edad.

                 Desde el punto de vista político a la Administración Central le interesa asegurarse de que los alumnos de toda España están estudiando lo mismo y en los mismos cursos, algo  a todas luces bastante lógico, pero esto choca con lo que la Generalitat piensa que es una exigencia democrática, dejando  clara su postura de no aceptará ningún cambio que afecte al modelo educativo actualmente vigente en Cataluña, no está dispuesto a renunciar a competencias desde las que pueda seguir defendiendo la personalidad catalana, y si esto es lo que piensa en Cataluña, ¿que no pensará en la Autonomía Vasca?. Con estas perspectivas lo más sensato es ir haciéndonos a la idea de, que el pacto autonómico que se pretende amasar  en materia de educación, va a ser más que problemático. Lo triste sería, una vez más, tener que constatar que cuando la política se mete en la escuela , la que sale perdiendo es la educación.

           Alguien ya se ha atrevido a decir que la democratización de la enseñanza ha traído como consecuencia una degradación de la misma , degradación que afecta no sólo a los bajos niveles de instrucción sino también al plano humano y moral de la persona, siendo esto último lo más preocupante.

           La pérdida del principio de autoridad , la actitud inhibicionista de unos, junto a la interesada y desmedida participación de otros, podría explicarnos muchas cosas de las que están pasando hoy en la escuela, donde en gran medida se va para prender sólo lo que algunos quieren que se aprenda y a recibir  la educación que los políticos quieren  que se reciba y no la que más conviene. Claro está que hablar en estos tiempos de lo que conviene o no conviene debe parecer a algunos poco menos que intolerable. Hoy se habla en términos de lo políticamente correcto, que ya sabemos todo lo que significa.

           El permisivismo y relativismo imperante en nuestra cultura impide que se hable en términos absolutos y que se piense en un sistema determinado de educación o en un modelo de persona. Ha dejado de tener sentido la búsqueda de  la Verdad y el Bien en sí mismos porque estos se dan ya por muertos, a lo más, se aspira a ser fiel así mismo , confundiendo  verdad con certeza y bien con el gusto personal. De este modo se ha llegado a pensar que todas las opiniones son igualmente válidas y por tanto es mejor sumar que restar, en definitiva , que todo vale.

 Ahora bien si esto fuera así carece de sentido intentar cambiar a las personas, basta con que cada cual se autoeduque, dejando que cada cual sea lo que quiera ser, sin más. Eso si hay que educar con las miras puestas en ese buen ciudadano, dechado de valores cívicos, en consonancia con los interese políticos y exigencias del sistema     Desgraciadamente  esto es algo de lo que está pasando.

            Se tiene conciencia que las cosa no van bien en educación . El fracaso educativo es un hecho notorio, todos lo sabemos, pero ¿que se puede hacer? Desde la perspectiva relativista pienso que bien poco. ¿ Cómo reformar un sistema educativo en profundidad sin una idea clara y precisa de educación? Por otra parte ¿Cómo tener idea precisa de educación si no se tiene una idea clara de lo que debe ser el hombre? Y por fin ¿ Cómo saber lo que debe ser el hombre si estamos instalados en un relativismo pluralista y contradictorio? Hoy lo que cuenta es la política y ya sabemos que el arte de la política es versátil según las circunstancias

           En el mejor de los casos tendremos que seguir hablando de una educación en valores cívicos , sin saber muy bien en que consisten éstos, pues al no tener un criterio válido de referencia, cada cual les podrá entender como le venga en gana. Es así como la tan cacareada “educación en valores” no pasa de ser en nuestra cultura relativista más que un formalismo sin apenas contenido.

           Así las cosas contentémonos con que la reforma educativa en marcha satisfaga las expectativas políticas , siendo de desear en el mejor de los casos, que los intereses de la Administración Central puedan armonizarse con los intereses de las autonomías . Como bien se ve la cuestión aquí en España está en manos de los políticos y no de los educadores y pedagogos, por lo mismo más que de reforma educativa cabría hablar de pacto autonómico en materia de educación.

244.-Tenemos la obligación de defender nuestra civilización cristiana.

  Si en algo estamos todos de acuerdo es que la fe y los valores cristianos son la base de la civilización occidental. Renunciar a ellos ser...